Todo profesional de procurement debe comprender a qué se enfrenta para poder hacer frente a los riesgos de compras, con el objetivo de proteger a su empresa de cualquier problema durante el proceso de compras. Las actividades de procurement son propensas a riesgos, por ello, prevenir, identificar y controlar esos riesgos puede marcar la diferencia.
Cuando hablamos de riesgos en las compras, nos referimos a los riesgos que conlleva la contratación de cada elemento de nuestra empresa. Esta serie de riesgos pueden estar relacionados con los siguientes aspectos:
- La calidad.
- La fiabilidad de los proveedores.
- Los lead times.
- El riesgo financiero.
- La logística.
- El suministro de materia prima.
Cuando existen tantas variantes en el puzle, es fácil que falte alguna pieza que nos lleve al fracaso. Por ello, contar con una estrategia de gestión de riesgos donde se monitoricen de cerca todos estos elementos permitirá evitar contratiempos no deseados, además de ayudar a ahorrar costos.
Riesgos de compras más comunes
1. Análisis de necesidades inadecuado
Es necesario realizar un análisis de necesidades para tener una dimensión global y clara de qué es lo que necesita la empresa, por qué lo necesita, cuándo lo necesita, cómo lo va a obtener y donde lo necesita. Este proceso de comprensión de qué es lo que necesita la organización es fundamental para alcanzar el éxito.
2. Gestión de contratos ineficaz
Cuando hablamos de gestión de contratos no solamente nos referimos al momento en el que le dices al proveedor lo que quieres y él lo hace, sino que se trata del conjunto de relaciones y habilidades de comunicación para trabajar en armonía conjuntamente con los proveedores, ya que la relación con los proveedores es mutuamente beneficiosa y busca reducir riesgos y costos.
La escasez de proveedores de confianza y procedimientos contractuales mal construidos pueden llegar a causar estragos en una empresa. Por ello, una buena práctica de evitar estos escenarios es auditar o analizar periódicamente el proceso de gestión de contratos para detectar cualquier ineficiencia y corregirla para el futuro.
3. Selección deficiente de proveedores
Escoger a los proveedores adecuados es unos de los aspectos más delicados y críticos que puede marcar el éxito o el fracaso de cualquier organización de compras. No escoger al proveedor idóneo puede provocar:
- Interrupciones de la cadena de suministro.
- Desempeño deficiente de los proveedores.
- Ineficiencias de los procesos comerciales.
4. Riesgos en la Supply Chain
Existe un cuarto tipo de riesgo, los riesgos en la Supply Chain. Se trata de todos los factores que forman la cadena de suministro y los riesgos que suponen. Cada elemento de la cadena de suministro supone un riesgo que hay que tener bien identificado y que hay que saber gestionar. Algunos de los más importantes son la calidad, el inventario, los desastres naturales, y pérdidas durante el transporte.
Mantener los estándares de calidad de un producto en Supply Chain tan complejas supone un reto para las empresas. Además, el lanzamiento de un nuevo producto puede resultar defectuoso y eso solamente se traduce en: devoluciones, reposiciones, plazos para subsanar el problema, detectar cual fue su origen, etc.
Manejar los inventarios con un elevado volumen de procesos supone un quebradero de cabeza para los departamentos logísticos. La predicción correcta de la demanda, llevando un control en tiempo real de dicho inventario supone en la mayoría de ocasiones un riesgo que hay que gestionar.
Además de estos riesgos, existen de otros que no son tan habituales, pero que hay que tener presentes, como por ejemplo las pérdidas durante el reparto o los desastres naturales. El más mínimo incidente durante un reparto puede desencadenar en consecuencias de pérdidas económicas, retrasos en los plazos de entrega, problemas con los seguros, entre otros.
Los desastres naturales son los más difíciles de prever y, sin embargo, los que mayores consecuencias pueden provocar. Desgraciadamente, tenemos el claro ejemplo en la isla de La Palma en las Islas Canarias, donde la erupción del volcán de Cumbre Vieja está azotando a la población y empresas.
5. Corrupción y fraude
Las incidencias de fraude y corrupción en las compras son más habituales de lo que parece. Para solventar este riesgo, la tecnología es nuestro mejor aliado. La centralización de la información nos permitirá monitorizar e identificar señales de alerta y fraude de una forma en la que los enfoques más tradicionales no pueden.
Beneficios de gestionar los riesgos de compras
Llevar a cabo una buena gestión de riesgos a lo largo del proceso de compras puede ayudar a propiciar los siguientes beneficios:
- Mejor servicio al cliente.
- Mejores relaciones con los proveedores y clientes.
- Servicio mejorado.
- Uso responsable y adecuado de los recursos.
- Mayor incentivo por apostar por la innovación.
¿Quieres conocer más sobre cómo podrías mejorar tu planificación de compras y evitar toda esta serie de riesgos? Pulsa aquí.